domingo

Tortugas, corales y langostas


Día 162
30 de enero 2011


Hoy estoy en el único bote holandés en la bahía.  Anteayer llegó otro bote, de una pareja con dos niños a bordo, que quieren hacer la vuelta al mundo en cinco años. Los encontré antes en Gran Canaria, y fue agradable hablar con ellos.  Los otros botes holandeses se retiraron anteayer, como despedida comimos panqueques de plátano a bordo.  Llevé mi guitarra y junto con otra persona hemos hecho música y nos hemos divertido.  Realmente super.  Por primera vez hoy día he buceado en el Caribe, y me encantó.  La escuela local de Buceo Cabrits me preguntó si quería participar con ellos, no me hice repetir la pregunta y subí de inmediato a bordo.  Hemos hecho dos inmersiones, y he visto pescados de colores, tortugas, muchísimo coral, langostas mega grandes; debajo del agua es precioso.  El resto del día lo dediqué a las tareas y a leer un libro.  Tengo que hacerlo por que si no, para qué he traído los libros.  Han anclado nuevos yates.  No hay viento y tampoco lluvia, o sea que hace un calor quemante.  
Laura




sábado

Abriendo Cocos y navegando en el Indian River

Día 161
29 de enero 2011

Ayer, junto con los tripulantes de los yates holandeses, hemos hecho lifting y visitado la Isla.  La Isla Dominica es realmente linda, muy verde.  Hemos caminado por cataratas y he partido un coco; con una piedra he chancado sobre el coco hasta que se rindió.  Esta mañana he abierto otro coco y me lo he comido, creo que me volveré profesional en este oficio.  Junto con otra mujer de otro yate he navegado en mi dinghy en el Río Indio (Indian River).  Normalmente, sólo puedes hacerlo si pagas a alguien 20 dólares para que reme.  Salimos a las cinco y media de la mañana, para que nadie nos detuviera al principio del río.  En este ambiente se ha filmado la película “Piratas del Caribe 2”, pero la casita está destruida y sólo queda un sitio vacío.  Hemos remado una buena distancia y también caminado.  Al regreso navegamos en aguas salvajes porque había corriente.  Si vas con alguien de la zona, no llegas tan lejos.  Nos divertimos muchísimo, el sitio era precioso, palmeros en todas partes y helechos super mega gigantes.  Muy refrescante nadar en agua dulce, todo un regalo!!.  Ahora estoy de regreso donde Guppy, e iré a bucear (Snorkelen) con un par de gentes, super ocupada!.   Pero en la Isla de los Santos he descansado bien.




Laura

viernes

Lluvia y viento en la travesía

Día 160
28 de enero 2011

Antesdeayer llegué a la Dominica.  El camino fue bastante rudo.  Era una distancia corta, pero había enormes chaparrones y habré estado diez minutos seca, de las cuatro horas que dura la travesía.  Debido a la lluvia venían tremendos golpes de viento, por el que una vez a pesar del Genua el agua anegó la cabina.  Ya estaba mojada porque el bote de goma (dinghy), en la cubierta de proa, se había desprendido y tuve que sujetarlo bien.  Pero no podía ver nada porque la cubierta de proa estaba bajo agua.  La segunda vez fui, armada de un casco de buceo para amarrar bien el bote de goma.  Sinceramente pensé tener un viaje más tranquilo, por lo que al dinghy lo sujeté sólo con una soga.  Cuando ya anclé en la Dominica tenía la impresión de haber estado en un bote laser, estaba completamente mojada, y estaba reponiéndome en la cabina, cuando apareció el primer bote local con fruta.  Ya he hecho los papeles de aduana, y luego me puse a descansar.  Hay otros dos yates holandeses en la bahía y con los navegantes he hecho una caminata.  Cuando estaba por el cañón en el fuerte ubicado en la cima de una colina, divisé el Stad Amsterdam entrando a la bahía.  Ayer fui a hacerles una visita y me alegré de ver caras conocidas. Sólo que hace poco ha habido un gran cambio de tripulación y había nuevos tripulantes a bordo.

Laura

miércoles

Hacia la isla Dominica

Día 158
26 de Enero 2011

Hoy continúo mi jornada.  Esta vez un viaje corto de 20 millas hacia Portsmouth en la isla Dominica.  Primero tendré que evitar todas las redes de pesca.  Hay un delicioso viento oriental de unos 4 a 5 beaufort.  Así que inmediatamente me pondré a limpiar adentro, para jalar el ancla.  Sólo tengo una wincha manual de ancla y eso funciona tan lento que creo que con la mano puedo hacerlo mejor.  Será mi gimnasia matinal.  Yupi, bajar el ancla es más fácil.  Hoy es el primer día que despierto con sol y no con lluvia.  Un buen comienzo del día, espero que siga así.  Creo que en Dominica no tendré Internet, entonces será más difícil poner fotos.  Pero quién sabe..
Laura

Quién es Jessica Watson?

Hace poco Jessica Watson fue designada como “La Joven Australiana del Año” por haber mostrado bravura y tenacidad durante su viaje solitario alrededor del mundo, concluido en mayo de 2010.  La adolescente batalló fieramente contra la soledad, las tormentas marinas y logró darse la vuelta al globo en 210 días.  Sus palabras al aceptar la nominación:  “Tú no tienes que ser algo o alguien para lograr algo.  Sólo tienes que creer en ello y trabajar duro.  No tienes que darte la vuelta al mundo en velero.  Sobre todo a los jóvenes:  sueña en grande y realiza tu sueño.”

El viaje de la adolescente despertó controversias y críticas en Australia.  Se puso en tela de juicio su capacidad y la madurez de sus padres.  Pero las condenas pronto se convirtieron en admiración, cuando ella persistió en su cometido.  Encontró vientos fieros, olas inmensas y varios golpes – uno de ellos derribó su mástil.  Su viaje empezó en Sydney, cruzó el Pacífico del Sur hasta el Ecuador, atravesó el Océano Atlántico hasta Sud Africa y luego cruzó el Océano Indico hasta alcanzar Australia.  Durante su viaje alrededor de Tasmania, la nave de Watson fue derribada varias veces en batalla contra las tormentas.

Siete meses después de su partida, el 15 de mayo de 2010,  arribó a Sydney en su yate de 10 metros de eslora, llamado Ella’s Pink Lady.  También se ha convertido en Embajadora de Navegación ( Sailing Ambassador), y recibió el título de Young Performer of the Year (Joven Deportista del Año).

Jessica Watson nació en Gold Coast, Queensland.  Su familia se mudó de Nueva Zelandia a Australia en 1987.  Todos sus hermanos tomaron clases de navegación siendo niños. La familia vivió en un bote de 16 metros de cabina y más tarde en un bus doble  (double decker bus)..  A los doce años ya supo cuál sería su ambición.  


N.T. Dejo este video de Jessica, poco antes de partir en su solitario, para que tengan idea de cómo era su yate por dentro y todo el instrumental que tenía, incluyendo paneles solares, radares, cocina, baño, cama, lugar para guardar cosas (en una net), radio, cd's, etc. 

martes

Laura en la Isla de los Santos - Ile des Saintes

24 de enero 2011
Día 157

Luego de comer un huevo en la cabina, tranquila, y de hacer algo de tarea, he ido a tierra.  Anteayer también estuve así que ya tengo idea de cómo es la isla.  Las casas son pequeñas, bajas, pintadas en beige y colores claros. Se habla francés, se paga con euros, no hay pan normal, en cambio abunda el baguette y croissant.  Eso es más rico.  He atracado frente a un pueblito que tiene un transbordador hacia Guadalupe, por lo que es agitado y turístico.  Es agradable caminar por las calles. Hoy día no me he tomado la molestia de caminar más allá.  Anteayer sí caminé hasta el otro lado de la isla, hacia el sur.  Allí había una playa llena de palmeros, muy bonita y con poca gente, además de mí, había otras tres personas.  Hoy llovió mucho más que ayer.  En Holanda cuando llueve, todo el mundo corre adentro.  Aquí llueve y todo el mundo sale afuera a recibir el agua, a ducharse o a limpiar sus botes.  
Laura


lunes

23 de enero de 2011
Día 156

Hoy día me quedé en el bote.  Ayer estuve en el puerto para hacer los papeleos ante la aduana.  Eso sucedió super fácil, vas a la oficina, ponen todos los datos en la computadora y eso es todo.  Los franceses son muy relajados. Llueve con frecuencia y fuerte.  No me molesta, porque no hace frío, al contrario, la lluvia limpia el bote y le quita la sal.  En el bote puedo recibir Internet con una señal wifi, eso es muy útil. También hice tarea del colegio en la cabina frente a una vista preciosa, que no pude disfrutar todo el tiempo porque tenía que mirar los libros.  Pero cuando terminé, con un sentimiento de satisfacción, pude dedicarme a gozar del panorama. Sí, hago tareas en domingo, eso sucede porque generalmente no sé qué día de la semana es, aunque tampoco importa mucho aquí.  Guppy está balanceándose rico en la bahía junto con otros cincuenta yates.  La islita no es muy grande pero sí es muy hermosa.  Tal vez mañana vaya un rato a tierra para conocerla mejor, hoy tengo pereza de caminar.
Laura

sábado

Marañas de redes de pescar

22 de enero 2011
Día 154

Ayer anclé en la Isla de los Santos, una pequeña isla entre Guadalupe y Dominica.  Es bonita y tiene un ambiente típico francés.  La travesía fue menos agradable.  Bueno, el navegar fue estupendo y a la altura de St. Kitts, tuve una puesta de sol preciosa, pero la cercanía de las islas no me permitió dormir, lo que hice después.  Estaba preparando el desayuno cuando, a la altura de Guadalupe, Guppy, después de un tirón, se quedó quieto. Corrí afuera para averiguar el motivo y descubrí que estábamos jalando unos treinta metros de marañas de redes de pescar.  Luego de haber maniobrado algo, nos hemos librado de ellas.  En esta área es común que te encuentres con esas marañas.  Hasta llegar a la Isla de los Santos he encontrado unas cincuenta.  Ahora estoy anclada junto al bote de una pareja de holandeses que apenas llegué me invitaron a cenar a bordo.  Siempre es agradable no tener que cocinar así que allí cené y luego me fui a dormir a pierna suelta.  
Laura

viernes

Mañana llego a Isla de los Santos

20 de enero 2011
Día 153

Me dirijo camino a la Isla de los Santos.  Hace buen clima para navegar, tengo un delicioso viento de costado; con las vela grande y el génova Guppy avanza a más de 6 nudos.  La distancia hasta la isla es más o menos 160 millas, así que creo que llegaré mañana en la tarde.  Ahora me encuentro a la altura de Saba.  Me alegro de haber tomado el tiempo para limpiar y arreglar el dinghy (lancha neumática), porque el océano es bastante movido.  Al salir de San Martín no hubo la fiesta que tuve cuando llegué, pero eso, hablando sinceramente, no me importa.   Esta mañana recibí de un navegante el libro Offshore Sailing.  La verdad es que he recibido varios regalitos, dos tarjetas y dos paquetes dirigidos a Laura Dekker, San Martín.  Super que todo llegó bien…  en uno de los paquetes había un libro sobre un navegante y en el otro, una especie de calendario con platos que se sirven en los barcos. Super fantástico!  Doy mis agradecimientos a los que me han enviado los regalos.

Laura

martes

A punto de partir hacia la Isla de los Santos

Día 150
7 de enero de 2011

Ayer decidí proseguir con el viaje.  Ya me he quedado suficiente tiempo en tierra y nuevamente añoro navegar.  El jueves prepararé las velas para partir hacia la Isla de los Santos, una islita entre Guadalupe y Dominica, donde estuve con el navío Stad Amsterdam.  Así que comeré, me aprovisionaré de agua y diesel, no crean que he usado mucho diesel, pero prefiero partir con un tanque lleno.  Guppy y yo estamos listos para la aventura.  La travesía hacia la Isla de los Santos durará algo más de 24 horas, me será un tanto difícil, porque no podré dormir.  Navegaré a través de varias islas, lo cual significa estar atenta durante la navegación.

Laura
Dejo unas fotos. 

(N.T. para ver más fotos de Laura hacer klik en la derecha, en Otros blogs para visitar:  Solozeilster.hyves.nl )











viernes

De regreso en San Martín - Laura in Sint Maarten

Día 147
15 enero

Ya estoy de regreso en San Martín y me voy a concentrar en mi gran aventura y mis pequeñas aventuras.  Todavía no he decidido cuándo partiré y adónde, pero creo que dentro de una semana reiniciaré viaje en dirección a la Isla de los Santos y a la Dominica.  A ésta última quisiera regresar una vez más para visitarla más de cerca.  Antes de partir, tengo que limpiar bien a Guppy, porque en la parte inferior tiene incrustaciones de fauna y flora marina y eso disminuye la velocidad del navío.  Me asusté un poco al dejarlo sólo por diez días.  Pero estaba en el mismo lugar, como si me hubiera ido hace diez minutos.  Me alegré mucho volver a ver a Guppy.  También me pareció fantástico navegar en el Stad Amsterdam. 

Laura




jueves

El Volcán Soufriere Hills - Isla Montserrat



N.T. Este video muestra la explosión del Volcán Soufriere Hills, el que vio Laura, y que destruyó la capital, Plymouth, y la mitad de la isla Montserrat en el año 1995.  Antes del desastre vivían 11,000 habitantes, entre ellos los cantantes Sting y Eric Clapton.  Muchos abandonaron la isla y ahora sólo quedan 4,500 personas. El volcán sigue estando activo. 

miércoles

Laura Dekker en Montserrat

Día 144
11 enero 2011

Estar en un navío tan grande significa trabajo duro pero divertido.  He trepado al mástil durante la navegación y eso me pareció fantástico.  Generalmente eso sucede antes o después de surcar el mar para desplegar las velas como aquí le llaman, eso significa preparar las velas para navegar, y naturalmente para el mantenimiento.  Pero ya en el mar se necesitaba hacer un bricolaje.  Super lindo desde la altura observar el agua y el paso de las olas.  Ayer la guardia roja (mi guardia) estuvo libre, y en la tarde fuimos a visitar Montserrat donde atracamos ayer.  La temperatura muy cálida, en todas partes platanales y una diversidad de plantas que no hay en Holanda.  Lo que me llamó la atención fue que todas las hojas son más o menos treinta veces más grandes. Encontramos a un campesino trabajando en su chacra, no tengo idea dónde era, porque no sabíamos dónde nos hallábamos.  Él estaba cosechando algo, cuando le dijimos que no conocíamos, él nos hizo probar, estaba rico, pero aún no sé qué era.  Luego de nuestra aventura por el interior, nos dirigimos a la capital, situada cerca de un volcán activo, que hace 14 años la destruyó por completo.  Debido a la actividad del volcán, la ciudad está deshabitada y se ha convertido en una especie de ciudad fantasma, realmente impresionante.  Ahora estamos camino a St. Barth (Saint Barthelemy) y luego mi aventura en el Stad Amsterdam llegará a su fin.  Después tendré que decidir qué islas me gustaría ver y cuándo parto.
Laura  

sábado

Día 140 
8 de enero de 2011

Aquí me va estupendamente.  Ayer hemos navegado desde la isla Dominica a otro lugar, usando el motor porque había escaso viento.  Una pena.  Durante el descanso para el café que aquí se llama “smoko”, avistamos un par de delfines.  La Dominica es una isla bien verde, muy bonita.  No he podido ver mucho de ella porque no disponemos de tiempo para ir a tierra.  Pero parece ser que tierra adentro también es de gran belleza.  Estoy pensando ir allá con Guppy.  Ahora nos dirigimos hacia Guadalupe donde probablemente arribaremos esta tarde.  Ya lo dije anteriormente, pero es realmente fantástico navegar en este navío. Sobre todo ahora que entiendo mejor cómo funciona todo y para qué sirven las cuerdas.  El resto del tiempo a bordo lo destino a hacer las tareas, a hacer mandados, a dormir, a comer, pero sobre todo a disfrutar de las nuevas experiencias.

Laura

viernes

A bordo del velero Stad Amsterdam

Día 138
7 de enero 2011

Tercer día en el velero Stad Amsterdam (Ciudad Amsterdam), empiezo a conocer la rutina.  Es genial!  Hago guardia de 12.00 a 4.00, menos mal que ya estoy acostumbrada a estar despierta de noche, así que no tengo problema. 

 Todo es nuevo y eso me agrada, seguro en un barco como éste.  Para mí es la primera vez que navego en un navío de este tipo y encima tan grande.  Es fantástico salir afuera y ver todas esas velas encima, sobre todo de noche, el agua que pega al costado resplandece por el fósforo y es muy lindo.  Parece un sueño. He estado trabajando con un sextante.  Estamos camino a la isla Dominica y luego iremos por todas las islas de regreso a San Martín.  Así que podré ver qué islas son bonitas para luego yo navegar por ellas.  Ahorita tengo guardia así que debo ir arriba.  Hasta más tarde!!
Laura


N.T. Dejo un video del velero Stad Amsterdam, de tres mástiles, tiene una tripulación de 35 personas.

jueves

La historia de la niña navegante: Laura Dekker



Desde muy temprana edad Dick Dekker sintió una atracción irresistible por el mar y la construcción de botes.  En su tiempo libre se dedicaba a dibujar veleros, a investigar, a leer revistas y libros sobre navegación, anotando todo en un cuaderno.  Más adelante con el dinero ahorrado, pudo llevar a la práctica el sueño que le obsesionaba desde hace años:  se construyó una embarcación de 12.5 metros de eslora, provisto de dos mástiles, bautizándole como “Diario”.  Dick estuvo en amores con una alemana, Babs Muller, que estaba de paseo por Holanda y quién también tenía un bote y amaba el mar.  La pareja se unió en matrimonio y decidió dar la vuelta por los mares del mundo.  Una verdadera aventura que duraría siete años: cuando se terminaba el dinero, Dick se dedicaba a mantener y reparar otras embarcaciones y Babs, con inclinaciones artísticas, ganaba dinero como payaso en los hoteles.  Reunían lo suficiente y continuaban el viaje hasta el siguiente puerto.  Se quedaron una larga temporada en la región del Caribe, disfrutando del clima cálido y las buenas ganancias.


Al descubrir que Babs estaba embarazada, se quedaron en Nueva Zelandia hasta el nacimiento.  El 20 de setiembre de 1995, en Whangarei, nació una graciosa niña rubia y de ojos azules, a quién bautizaron con el nombre de Laura. La familia compró un stationcar para recorrer el país y conocer sus bellezas naturales, mientras la bebé Laura dormía plácidamente en una caja de cartón con mantas.  Les gustó mucho el país e intentaron quedarse para residir, pero como Dick no tenía trabajo fijo, el permiso les fue negado.  Tuvieron que  continuar viaje hacia las islas Fiji donde alquilaban el yate para ganar dinero. En Suva, capital de Fiji, luego de una disputa conyugal, Babs abandonó el yate con la niña.  La convivencia prolongada en un espacio reducido puede traer consigo tensiones.  Cuando se le pasó el enojo, al regresar al puerto se dio con la sorpresa de que su marido se había marchado en el yate rumbo a Australia.  Babs se regresó en avión con la niña donde su familia alemana.  Sin embargo luego de un tiempo empezó a extrañar a su pareja; en un mercado navideño hizo negocios y ganó lo suficiente para comprar los tickets de avión hasta Brisbane, Australia, donde Dick la esperaba con un banderín:  “Bienvenidas a casa” .  La pareja se compuso y continuaron el viaje por mar,  pasearon por Melbourne y Sydney, visitando muchos zoológicos y parques de juegos. 

Las primeras palabras de Laura fueron "bye, bye" y "dinghy".  La niña hacía adiós a todos los ocupantes de los botes que veía y se quedaba extasiada contemplando hasta que se perdían en la inmensidad del océano.  No sentía miedo, al contrario, le encantaba y se sentía en el yate y en el mar como en casa, siempre sujeta a una cuerda de salvamento.  Los navegantes nunca se quedan mucho tiempo en tierra y los Dekker continuaron su periplo hacia Indonesia y el Estrecho de Malakka donde a la altura de Singapur se vieron envueltos en una cortina espesa de humo, causada por enormes incendios en Sumatra.  Salieron ilesos del apuro. Cuando se hubo acabado el dinero, la pareja decidió regresar a Holanda para llenar las arcas.  Dick consiguió empleo de inmediato y luego de un tiempo regresó a Malasia a recoger su bote, dándose con la sorpresa de que le habían robado sus equipos de navegación.  Si embargo, hablando con los ancianos de la isla, pudo con suerte recuperarlos todos.  Se embarcó y emprendió un viaje solitario hasta Holanda, topándose en el Mar Rojo con una tormenta de arena. 

A fines de junio nació en Alemania Kim, hermana menor de Laura.  Las dos niñas fueron registradas como ciudadanas holandesas.  Como el yate Diario era muy pequeño para albergar a toda la familia, lo vendieron y se fueron a vivir en una casa en la ciudad holandesa de Lelystad.  Allí Laura asistió al colegio durante tres años, siendo el único periodo que vivió en tierra.
La relación no marchó tan bien en la pareja Dekker, decidiendo seguir cada uno su camino; Kim se quedó con la madre y se marcharon a Alemania.  Laura, de seis años, eligió quedarse con su padre, yéndose a vivir al bote que Dick estaba construyendo en Wijk van Duurstede. 

La embarcación aún no estaba terminada pero era habitable, estaba atracada cerca de una antigua fábrica de ladrillos en el lecho del río Lek.  Desde allí Laura manejaba la bicicleta con mochila a la espalda sobre el dique, recorriendo tres kilómetros hasta el colegio, mostrando entusiasmo por aprender.  La cercanía del agua y el rumor del tráfico fluvial despertaron en la niña los recuerdos de los viajes por mar que hizo con sus padres.  No pudo vencer la tentación, con ayuda de maderas y clavos ella se construyó una embarcación primitiva. Viendo Dick el interés de la pequeña, arregló un bote viejo, rojo, llamado El Optimista y se lo regaló cuando Laura sopló seis velitas.  Mientras otras niñas se divertían vistiendo a las Barbis, dibujando o armando rompecabezas, Laura, bajo la estricta mirada de su padre, aprendió a guiar un velero y a tomar en cuenta las reglas de seguridad indispensables.  Dick pensaba que era necesario que ella supiera reaccionar en situaciones de emergencia, por ello volteaba a propósito la embarcación--estando ella adentro-- y Laura, sujeta siempre a su cuerda de seguridad, debía nadar y bucear bajo el bote hasta ponerlo derecho.
Mientras Dick se iba al trabajo y hacía labores temporales aquí y allá, Laura, de ocho años ya sabía cocinar, hacer las compras y era responsable de las labores caseras.  Tal vez aquí esté la clave de su carácter independiente que le ha permitido madurar antes que otros niños.

En las vacaciones surcaba el río en el Optimista, aprendió a “leer el agua” :  ¿Por qué cambia el viento de repente?  Cómo es el viento más allá, es más suave o más fuerte?  De su padre recibió un librito con la teoría de la navegación, aprendió a hacer nudos, los nombres de los nudos, las velas y demás arreos y aparejos que hay a bordo. Con mucha paciencia, Dick le fue enseñando el arte de pilotar una nave: a mirar el cielo y reconocer las estrellas, a diferenciar los vientos, a navegar en buen clima, en lluvia y en tormentas; en caso de que el motor no funcionara, a guiarse por las estrellas.  
Un miércoles Laura llegó con su bote a un club donde se impartían clases de navegación a la juventud.  Viéndola tan pequeña y curiosa, le dejaron navegar junto con los chicos; desde entonces, Laura era infaltable los miércoles, y de vez en cuando ella también podía enseñar a los principiantes a perder el miedo.
Al final de la estación, la Asociación de Navegación del Rin y Lek organizó una competencia.  Ella le sacó lustre a su Optimista y participó… ganando el primer premio.  Desde entonces  vistiendo un traje seco (dry-suit), salía a navegar, de preferencia con viento fuerte.   

Poco después sucedió algo terrible, su padre se enfermó y se quedó todo un año sin trabajo.  Tiempos muy difíciles y con escasos medios.  Recibieron ayuda de los familiares y conocidos, Laura heredó las ropas de sus amigas y primas, y un matrimonio les llevaba comida de vez en cuando. Ella le decía diario a su padre:  “!Mañana irá todo mejor, papá, ya verás!
Cuando el padre se recuperó, Spot hizo su entrada en el hogar. Laura estaba feliz con el perro que se convirtió en fiel compañero de sus aventuras.  En 2004 un conocido, cuya hija se había hartado del deporte acuático, le regaló a la pequeña Laura un bote Mirror.  Desde entonces ella acumuló copas de competencias náuticas.  Siendo muy niña seguía con interés las noticias del deporte acuático y ya se imaginaba a sí misma dando la vuelta al mundo en un yate, como su heroína, Tania Aebi, que a los dieciocho años logró esa hazaña.  Mientras tanto sus horizontes se ampliaban y surcaba lagos más amplios y lejanos.  

El padre de Laura en una entrevista declaró que el motivo por el que él ha consentido que su hija haga este viaje sola es porque él confía plenamente en ella, en su instinto, en caso de necesidad Laura no entra en pánico, permanece calmada y sabe lo que tiene que hacer.  Por ejemplo en su viaje solitario que realizó a Inglaterra (Mayo, 2009), la hélice quedó atrapada en una red y Laura, sin pedir ayuda, se lanzó al agua con un cuchillo y cortó la red liberando la hélice.  Dick Dekker añadió: “para cada padre es difícil desprenderse de un hijo, pero tiene que suceder, es una obligación.  Un hijo no es una posesión, es una persona.  Lo único que debes hacer, como padre, es guiarle”.  

Nota del Traductor. Escribí este esbozo luego de leer el libro “Mi Historia” ( Mijn Verhaal, escrito por la abuela de Laura, Riek Dekker, en base a conversaciones con su nieta y a sus diarios ) y también contiene algo de una entrevista del diario Volkskrant a Dick Dekker.




miércoles

Lista para zarpar como tripulante!!

Día 137
5 de Enero 2011

Un saludo para todos!! Un navío de la ciudad de Amsterdam con grandes velas cuadradas está anclado en San Martín. Ahora estoy por tercera vez a bordo y me han invitado para navegar como tripulante durante los próximos diez días.
Realmente genial!  Es un barco muy bonito y me gusta la idea de no ser capitán por unos días.  Esta noche partimos y estoy emocionada.  Los últimos días he alistado a Guppy como para zarpar.  Pero una oportunidad como ésta naturalmente no la desperdiciaré.  Blogear será más difícil, pero intentaré hacerlo cada dos días sobre las experiencias que tenga. 

Laura   


sábado

Felíz Año Nuevo desde San Martín

Día 133
1 enero de 2011

Un FELIZ AñO NUEVO a todos!! En Holanda es ahora casi el día 2, pero aquí todavía no.  Ayer rendí el último examen del 2010, y por lo demás todo está tranquilo.  Limpié a Guppy, hice algunas reparaciones, porque si no, no podía recibir el año nuevo.
No he prendido fuegos artificiales, porque está prohibido en el lado holandés de la isla… pero sí se ha ahuyentado a los espíritus!!.  Hubo un show de fuegos artificiales en Phillipsburg que duró veinte minutos, adonde fui con algunos amigos a mirar.  Esta mañana intenté entrar a Internet, pero naturalmente todo estaba cerrado.  El único lugar donde encontré Internet fue en Mac Donalds, donde estoy ahora.  En pocos momentos habrá una inmersión en el mar por el año nuevo, eso es más agradable que en Holanda, porque el agua aquí no es tan fría!!!

Quedo muy agradecida  a todos los que colaboraron financieramente, seguramente que ahora sí podré continuar con mi viaje en dirección al Pacífico.

Laura